Los docentes porteños llamaron a un paro de 24 horas en reclamo de la suspensión de las clases presenciales, en el contexto actual de incremento de casos de covid, especialmente en la ciudad de Buenos Aires y el área metropolitana.
En los últimos días gremios como Ademys y Camyp habían llamado a un paro de 24 horas pidiendo la suspensión temporal de la presencialidad educativa, mientras que el gremio más números en afiliados UTE llamaba a una jornada de protesta sin paro.
Las fuerzas de las bases docentes llevaron a la conducción de UTE a sumarse al paro, l sindicato que conduce Eduardo López que lanzó anoche la convocatoria a la medida de fuerza a través de sus redes sociales bajo la consigna “Miércoles 14 de abril: paro docente. Porque la unidad es el camino”.
Los datos de ayer lunes cuando la ciudad de Buenos Aires alcanzo su record de casos diarios con 3.358 positivos de Covid-19 en las últimas 24 horas, generaron mucha preocupación entre los docentes.
Los efectos de la segunda ola se hacen sentir en la ciudad saturando el sistema sanitario y aunque desde los gobiernos (nacional y de la ciudad) afirmen que la escuela no es lugar de contagios, no existe rigor científico en esta afirmación, la preocupación aumenta.
Por su parte en sintonía con el GCBA el Ministro de Educación de la Nación Nicolás Trotta, insistió ayer en la posibilidad de reducir la presencialidad en instituciones o zonas donde la situación lo amerite, pero remarcó que “las escuelas no se cierran”.
