Toman un comedor comunitario de la villa 21 del barrio de Barracas
Asi de increíble pero real, el cura párroco Padre Toto de extensa trayectoria y significativo compromiso social relato de sucedido en la villa ubicada en la comuna 4 de la ciudad
Comunicado del Padre Toto de la Parroquia de Caacupé de Villa 21, sobre el comedor Nuestra Señora de Lujan de la parroquia Caacupé en el asentamiento Magaldi, el parrocó expresó:
Paso a relatarles un suceso que ocurrió desde el sábado 22 de mayo poniéndolos también en contexto.
El hecho ocurrió en el Comedor Nuestra Señora de Lujan, ubicado en la calle Orma casi esquina Magaldi, en el Asentamiento Magaldi.
Dicho predio fue conseguido por esfuerzo conjunto entre la Parroquia Caacupé y vecinos del Asentamiento con el consentimiento del I.V.C alrededor del año 2011/2012 cuando por la sentencia de la Causa Mendoza para liberar el Camino de Sirga se había relocalizado a las familias que vivían a la vera del Riachuelo.
Al derribarse todas las viviendas, también fue derribado el Comedor Nuestra Señora de Lujan que funcionaba allí desde hacía varios años.
En ambos lugares fue la Parroquia Caacupé la que administró el comedor y el espacio. En el lugar actual la Parroquia consiguió los fondos en el año 2012/2013 para construir las actuales instalaciones.
Desde el principio del antiguo lugar hasta el presente, la Parroquia Caacupé fue haciendo las tratativas para que se formara el Grupo Comunitario que lleva adelante el Comedor, siempre acompañado de otras acciones comunitarias que fueron variando con el tiempo, como apoyo escolar.
Todo esto se viene realizando con el apoyo de toda la organización de la Parroquia Caacupé, puntualmente desde la Casa Social Madre Teresa y el Consejo pastoral de la Parroquia Caacupé.
El sábado 22 de mayo a la mañana hasta pasado el mediodía, nos vimos obligados a incumplir el primer día de confinamiento dispuesto por el Gobierno Nacional y el Gobierno de la Ciudad, ya que un grupo de vecinos del asentamiento Magaldi se presentó en el Comedor exigiendo que se les entregara en el mismo momento la llave del lugar y que se retirara la gente del Grupo Comunitario.
Al expresar yo que la gente del grupo comunitario son las personas que la parroquia reconoce como confiables para desarrollar la tarea, ellos expresaron que también se retirara la Parroquia Caacupé de ese lugar, aduciendo también que tanto los miembros del grupo comunitario como la misma Parroquia eran de la Villa 21 y no del Asentamiento Magaldi, aún cuando yo les expresé que tal Asentamiento forma parte de la jurisdicción para la Misión de la Parroquia.
Todo esto entre gritos, burlas y faltas de respeto a mi persona en cuanto a mi rol ahí.
Esta situación no fue sorpresa, ya en otras ocasiones algunos de estos vecinos se habían acercado a expresar el descontento con la gente del Grupo Comunitario.
Teniendo en cuenta todo esto, yo les propuse profundizar el dialogo e incorporar al equipo del grupo comunitario a algunos vecinos más, ya que un miembro del grupo vive allí.
Pero ellos (tampoco entiendo el grado de representatividad que tienen) insistieron en que el grupo comunitario se retirara por completo y que en el mismo momento se les entregara la llave. Dijeron que no se moverían de ahí.
Como no me parecía conveniente judicializar la situación con denuncia, al sentirme absolutamente presionado por estas circunstancias, llamé a las autoridades del “Grupo Comunitario” de CABA y concerté que pudieran acercarse al lugar el miércoles 26 de mayo. Les tuve que decir a estos vecinos que la Parroquia Caacupé se retiraría de ese lugar desde el miércoles.