El establecimiento sanitario pediátrico del barrio porteño de Parque Patricios se suma a las acciones comprendidas en el Día Mundial de Reciclaje. El Garrahan a través de la Unidad Pediátrica Ambiental, el Garrahan está llevando a cabo distintas acciones que fomentan la concientización sobre la importancia de cuidar el medio ambiente.
En el Día Mundial del Reciclaje, la Unidad Pediátrica Ambiental –un grupo compuesto por trabajadoras y trabajadores del Garrahan creado para proteger la salud infantil en cuestiones relacionadas con el ambiente–, reafirma su compromiso con el cuidado del planeta a través de una adecuada disposición de residuos y el consumo sostenible.
La Unidad, que retomó sus actividades en diciembre del año pasado, continúa realizando acciones que contribuyen a concientizar y mejorar nuestros hábitos de consumo y descarte. Algunas de ellas son:
Confección de bolsas reutilizables para que el personal traslade alimentos desde el comedor y así reducir el uso de las bolsas camiseta.
Implementación de cartelería que fomenta el uso de cubiertos propios para dejar de usar los descartables.
Realización de capacitaciones y elaboración de un instructivo para la correcta separación de residuos y distribución de cestos para material reciclado.
Elaboración, junto con el Servicio de Alimentación, de una prueba piloto de reciclado de biberones.
Acondicionamiento de un sector en el primer piso para el enjuague y disposición de los biberones con personal asignado a ese fin.
Además de las acciones de la Unidad Pediátrica Ambiental, la Fundación Garrahan lleva a cabo el Programa de Reciclado y Medio Ambiente desde 1999.
Mediante la regla de las tres erres: Reducir, Reutilizar y Reciclar, se busca disminuir el volumen de residuos, seguir utilizando todo lo que sea posible antes de desecharlo y, en el último paso, someter los materiales al proceso de reciclado para que puedan volver a utilizarse.
El Día Mundial del Reciclaje fue instaurado por la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) en el año 2005. Uno de los desafíos más importantes que se proponen es lograr un cambio de hábitos: adoptar mejores prácticas y conseguir un trabajo articulado con distintos sectores de la sociedad para reducir la contaminación que ocasiona la incorrecta separación de residuos.
