Justificando la medida con la afirmación que el funcionario no informó sobre la caducidad de los productos, el Ministerio de Sandra Pettovello decidió despedir a u funcionario de confianza.
El Gobierno nacional decidió echar al secretario de Niñez y Familia del Ministerio de Capital Humano, Pablo de la Torre, en medio de la polémica por los alimentos que estaban almacenados y que no fueron repartidos.
La cartera emitió un comunicado en el que señaal que “El Ministerio de Capital Humano, a cargo de Sandra Pettovello, informa que a raíz de una información recibida sobre el estado y fechas de vencimiento de determinados productos adquiridos por el gobierno anterior (los cuales se encuentran en los galpones de Villa Martelli y de Tafí Viejo, en la provincia de Tucumán, del ex Ministerio de Desarrollo Social), ha llevado a cabo una auditoría y ha decidido limitar las competencias de los funcionarios y empleados responsables que, por mal desempeño de sus tareas, no han realizado un control permanente de stock y de vencimiento de mercadería”, expresó.
En los últimos días el juez federal Sebastián Casanello le ordenó al Ministerio de Capital Humano que en 72 horas elabore un plan para distribuir esos bienes que se encontraban guardados en galpones de las provincias de Buenos Aires y de Tucumán.
La decisión de desplazar a De la Torre coincidió con una semana de cambios en el Gobierno Nacional, donde la principal salida fue la del ex jefe de Gabinete, Nicolás Posse.
El sábado pasado, De la Torre había asegurado que los alimentos que había en stock “están en perfecto estado” y están destinado “para todo lo que son emergencias”.
“La comida está en perfecto estado, no está vencida, no se está pudriendo y se utiliza directamente para todo lo que son emergencias. En la Argentina hay una catástrofe cada 10 o 15 días y hay que asistir”, sostuvo el entonces secretario de Niñez y Familia del Ministerio de Capital Humano.
Sin embargo, la cartera informó que había alimentos caducos que no habían sido repartidos y culpó a esa secretaría por no llevar un control de los mismos.
