La empresa Textilcom anunció el cierre de sus dos plantas ubicadas en las provincias de La Rioja y Catamarca, lo que resultó en la desvinculación de 267 trabajadores. Actualmente solo sigue operativa la sede Villa Soldati, donde la preocupación de los trabajadores se hace sentir
La firma, que tiene su sede principal en Villa Soldati, Buenos Aires, contaba con tres plantas dedicadas a la producción de indumentaria para marcas reconocidas como Grisino, Cristóbal Colón y Cheeky.
Ante la situación, el ministro de Industria, Comercio y Empleo de Catamarca, Sebastián Caria, señaló al medio local BAE Negocios que desde el Gobierno se encuentran buscando a alguien que retome la actividad y pueda darle trabajo a toda la dotación lo antes posible.
El gobierno provincial ha ofrecido la fábrica “llave en mano” a posibles inversores, con la condición de que se pueda reactivar la producción inmediatamente.
Aunque las máquinas pertenecen al propietario de Textilcom, Carlos Vilariño, están disponibles para negociación. Caria detalló a dicho diario que los contactaron seis interesados.
Aunque los nombres de los interesados se mantienen en reserva, ya hubo dos visitas a la planta y una reunión por videoconferencia. La planta de Catamarca, especializada en confección de punto, cuenta con trabajadores con experiencia en la producción de diversas prendas, lo que aumenta su atractivo para los posibles inversores.
