El pasado miércoles, familiares y activistas se reunieron en el Cementerio de Chacarita para despedir a Roxana Figueroa, Andrea Amarante y Pamela Cobbas, las tres mujeres lesbianas asesinadas en un hotel de Barracas el pasado 5 de mayo.
Primero hubo un velorio en una sala de La Paternal y luego se realizó el cortejo y la despedida final en Chacarita. La ceremonia contó con la presencia de familiares, activistas y ciudadanos en general.
Perla Aguirre, integrante de la Asamblea de Lesbianxs Autoconvocadxs por la Masacre de Barracas, expresó que es un momento muy triste pero que también cierra un ciclo necesario para ellas y para Sofía Castro Riglos, la única sobreviviente.
El domingo 5 de mayo, pasadas las 23:30, el vecino Justo Fernando Barrientos ingresó al cuarto donde residían las cuatro mujeres y les arrojó un artefacto explosivo. Además de los tres asesinatos, Sofía resultó herida.
Barrientos fue procesado por “homicidio doblemente agravado” contra las víctimas y “lesiones” contra Sofía. Los agravantes aplicados fueron alevosía y peligro común, pero aún no se considera un crimen de odio por orientación sexual ni violencia de género. En la ceremonia se entono Puerto pollenmsa , tema emblema de la lucha de genero.
