La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) y la Asociación de Profesionales y Técnicos del Hospital Garrahan (APyT), junto a otros sindicatos, han decidido llevar a cabo un nuevo paro con movilización hacia Plaza de Mayo como parte de su lucha por demandas salariales. También se aprobó otra medida de protesta para finales de este mes.
Con el conflicto intensificándose y el Gobierno nacional afirmando que el Hospital Garrahan “está funcionando con normalidad”, los sindicatos han criticado a los funcionarios actuales, acusándolos de “fingir demencia” y de tener una “política criminal contra la salud pública”, según lo expresó Alejandro Lipcovich, secretario general de ATE en el hospital del barrio porteño de Parque Patricios.
Lipcovich señaló que “el problema salarial no solo permanece sin solución, sino que se agrava mes a mes”, mencionando un aumento del 1% para este mes y un salario congelado para los meses siguientes. Además, advirtió que “si no hay respuestas, debemos intensificar nuestra lucha” ante la situación general provocada por Javier Milei.
Se ha programado una nueva huelga para el martes 22 y otra para el jueves 31 de octubre. Lipcovich enfatizó la necesidad de que todos los hospitales se unan a la protesta contra las amenazas del gobierno de desmantelarlos, anunciando que será “una gran movilización del sector salud debido a la crítica situación en todo el país”.
Una delegación de trabajadores del Hospital Garrahan se presentó ante la Comisión de Salud del Senado para exponer las dificultades que enfrentan, dado que el hospital maneja 700 mil consultas ambulatorias y más de 120 trasplantes anuales. María Althabe, coordinadora de una unidad de Cuidados Intensivos en Garrahan, afirmó que los reclamos salariales “llevan meses sin respuesta” y advirtió sobre el riesgo que corre el modelo de atención del hospital, que es “de alta complejidad” y requiere personal altamente calificado y comprometido.
