Con 11 años, no sólo estableció la plusmarca local como el jugador más joven en participar en la final del principal certamen vernáculo, sino que encabeza el torneo. El prodigio argentino y dueño de un récord mundial como el maestro internacional de ajedrez más joven de la historia, sigue sorprendiendo. Ahora, con poco más de 11 años, lidera el Campeonato Argentino Superior Absoluto al cabo de las 3 primeras rondas.
Oro ahora, ocupa ahora el primer lugar de la tabla con 2,5 unidades, media más que sus cuatro escoltas: Coro y los grandes maestros Fernando Peralta (pentacampeón argentino y defensor del título), Sandro Mareco (número uno de Argentina) y Federico Pérez Ponsa.
Los primeros entablaron entre sí y el último empató con el maestro FIDE Germán Spata. A su vez, entablaron los grandes maestros Diego Valerga y Leandro Krysa.
El niño tuvo un gran arranque y además podría conseguir en el torneo su primera norma de gran maestro. Para eso tiene que hacer 8 puntos en 11 rondas aunque no es el favorito para ganar el certamen.
Este viernes afrontará una prueba de fuego: enfrentarse con el séptuple campeón argentino, y jugador más desequilibrante del torneo, Diego Flores. No será una partida más para Faustino, no solamente por la jerarquía del adversario, sino también porque Flores es un fajador nato, un ajedrecista que rompe los esquemas ya desde la apertura. Su estilo intransigente es a la vez su punto fuerte y su talón de Aquiles, porque, así como Diego desborda a la mayoría de sus rivales, el exceso de riesgos que toma puede volvérsele en contra, dicen los expertos.
