En una fresca noche en Parque Patricios Huracán y Deportivo Riestra protagonizaron un duelo vibrante, cargado de emociones y goles, el Globo logró con justicia su pasaje a cuartos del final al derrotar por 3-2 a Malevo en un verdadero partidazo. Los goles los marcaron Eric Ramírez en dos ocasiones y Nicolás Sansotre en contra ante un tiro de Miljevich y Antony Alonso y Nicolás Benegas, para Riestra.
En un partido disputadísimo jugado como una final y donde el Globo siempre quiso más, cuando se iba el primer tiempo en el descuento, llegó el primer gol. Un centro desde la derecha del defensor Hernán De La Fuente permitió el cabezazo del volante Emmanuel Ojeda por el segundo palo, quien asistió a Ramírez, que controló de pecho en el área chica y convirtió de volea, con un tiro bajo al palo izquierdo del arquero Ignacio Arce.
El empate transitorio llegó a los 13 minutos de la etapa complementaria: Benegas, mostrando oficio en el área, controló de espaldas y filtró un pase preciso para Alonso, quien, partiendo en posición adelantada, se escapó por el costado izquierdo y definió de primera con un remate rasante y cruzado, imposible para la estirada de Hernán Galíndez, que vio cómo la pelota se colaba junto a su palo izquierdo.
Sin embargo, la alegría le duró poco al conjunto visitante. Apenas once minutos después, Huracán volvió a tomar la delantera. Un centro pasado desde la izquierda encontró a la defensa de Riestra mal parada; el rebote le quedó servido a Ramírez, que no dudó y sacó un potente disparo bajo y cruzado desde el corazón del área, decretando el 2-1 y desatando el festejo de la parcialidad local.
El partido no daba respiro y a los 32 minutos de la segunda mitad llegó el cuarto grito de la noche. Agustín Urzi comandó un contragolpe letal, manejando con inteligencia un tres contra dos. Se cerró desde la derecha hacia el centro y habilitó a Matko Miljevic, que ingresaba por la izquierda. El mediocampista buscó el remate abierto y, con algo de fortuna, la pelota se desvió en Nicolás Sansotre, descolocando al arquero y entrando por el primer palo.
Riestra no bajó los brazos y, apenas cuatro minutos más tarde, logró descontar. Tras una jugada colectiva de alto vuelo, Alonso volvió a ser protagonista, pivoteando para asistir a Benegas. El delantero sacó un remate seco y cruzado desde el borde del área, con un disparo bajo que se metió pegado al segundo palo, inatajable para Galíndez, decorando el resultado de un encuentro que mantuvo la tensión y el espectáculo hasta el pitazo final.
