Juliana Santillán: ignorancia y mala fe

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En la emisión del martes del programa “Una vuelta más” de TN, la diputada de La Libertad Avanza (LLA), Juliana Santillán, protagonizó un episodio que puso en evidencia tanto su desconocimiento de datos oficiales como una postura cuestionable frente a las demandas de médicas residentes del Hospital Garrahan. Durante el programa, Santillán intentó desestimar las reivindicaciones salariales de las trabajadoras de la salud, argumentando que sus ingresos superaban la canasta básica para una familia tipo, cifra que situó en 360 mil pesos, un monto considerablemente inferior al valor real.

El cruce se produjo cuando las médicas expusieron que sus salarios, que rondan los 800 mil pesos mensuales, no les permiten cubrir gastos básicos como el alquiler y el costo de vida. Santillán respondió reiteradamente que sus sueldos superaban la canasta básica mensual y calificó sus reclamos de “con mucha carga política”. Sin embargo, la cifra que la diputada citó correspondía en realidad al gasto mínimo para una sola persona, no para una familia tipo de cuatro integrantes, cuyo valor oficial ronda el millón de pesos, según datos del INDEC.

Este error fue señalado por otros panelistas y expertos durante el programa, quienes aclararon que la cifra correcta para la canasta básica familiar es casi tres veces superior a la mencionada por Santillán. A pesar de las correcciones, la diputada insistió en su versión, lo que generó críticas sobre su capacidad para interpretar estadísticas oficiales y su desconocimiento de la realidad socioeconómica de los trabajadores.

El episodio se enmarca en un contexto de conflicto laboral en el Hospital Garrahan, donde las médicas residentes llevan semanas en paro exigiendo una recomposición salarial y mejores condiciones laborales. Mientras el Ministerio de Salud anunció un bono de 300 mil pesos, los profesionales aseguran que no hubo una verdadera instancia de diálogo ni propuestas satisfactorias.

Tras la emisión, Santillán compartió en redes sociales una captura del informe del INDEC y sus declaraciones, reconociendo implícitamente su error, pero atribuyendo a una médica residente la difusión de información incorrecta. La situación generó reacciones en el ámbito político y mediático, con el respaldo de figuras del oficialismo y críticas hacia el canal TN por supuestamente haber organizado una “emboscada” contra la diputada.

En suma, el intercambio dejó al descubierto no solo un desacierto en el manejo de datos oficiales por parte de la legisladora, sino también una actitud que fue percibida como despectiva hacia las legítimas demandas de los trabajadores de la salud, en un momento de creciente tensión y reclamos en el sistema sanitario público.

 

 

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