En el marco de una protesta que incluida una huelga de hambre por el derecho a trabajar trabajadores y trabajadoras de la vía pública de Liniers enrolados en la Unión de Trabajadorxs de la Economía Popular (UTEP) fueron reprimidos cuando iniciaban en el día de ayer una huelga de hambre con acampe en Avda. Rivadavia y José León Suarez en el centro comercial del barrio de Liniers. Los trabajadores le exigen al Gobierno de la Ciudad que les permita trabajar y repudian la feroz represión de a fueron víctimas en el día de ayer, siendo brutalmente desalojados por la Policía Porteña. En un comunicado los integrantes de UTEP rama trabajadores de la Vía Pública señalaron que “Reprimieron, desalojaron y robaron los objetos personales de lxs trabajadorxs, Policías varones, de civil y uniformados, golpearon a compañeras y se llevaron a la fuerza sus objetos personales – termos, reposeras, mantas, elementos de sanitizacion, mesas, entre otros – con un saldo de tres compañeras golpeadas y heridas”. La orden para la represión y el desalojo fue impartida por la fiscal Celsa Ramírez, titular de la Fiscalía de Primera Instancia en lo Penal, Contravencional y de Faltas N° 30. Los trabajadores decidieron en una asamblea continuar con la huelga de hambre en la puerta de la Iglesia San Cayetano sobre la calle Cuzco 150 con el permiso del cura a cargo del santuario. También señalaron los trabajadores de la vía pública que el derecho a trabajar es una necesidad urgente y continuaron su protesta bajo el lema “Nuestro Trabajo no es delito” siguiendo con la Huelga de Hambre de la Rama de Trabajadores de la vía Pública de Liniers
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