La Defensoria del Pueblo pidió por la creación de un Ministerio de Mujeres en CABA
La Defensoría del Pueblo conducida por Alejandro Amor presentó un proyecto de declaración en la Legislatura Porteña en el que pretende avanzar con la conformación de un Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad en la Ciudad de Buenos Aires. La Constitución Porteña por medio de los artículos 85 y 137 permite a este organismo la presentación de proyectos al poder legislativo.
El proyecto que lleva la firma del Defensor del Pueblo incluye una propuesta para jerarquizar los servicios y programas de la actual Dirección General de la Mujer y ya recibió el apoyo de las autoridades del Parlamento de las Mujeres de Ciudad.
La iniciativa es sencilla en cuanto a la declaración en si, donde expresa “La Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires vería con agrado que el Poder Ejecutivo de la Ciudad tome las medidas necesarias para la creación de un Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad en la Jurisdicción de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”.
En este sentido, se recoge el antecedente de la creación de un ministerio de este tipo en a nivel nacional y en la Provincia de Buenos Aires, así como lo que establecen diversos instrumentos internacionales, tales como la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW), la Convención Interamericana para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra la mujer (Convención Belém do Pará), y los llamados Principios de Yogyakarta de Naciones Unidas, entre otros.
Además la iniciativa sostiene que resulta necesario ampliar los programas y servicios existentes y desarrollar nuevas políticas públicas para garantizar los derechos de las mujeres y el colectivo LGBTTI, dado el gradual vaciamiento de los recursos humanos y materiales de la Dirección General de la Mujer, y la paulatina reducción relativa del presupuesto ejecutado en relación con el resto de las áreas del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat.
En esa sintonía la Defensoría observa “inconvenientes tanto en la asistencia directa de mujeres en situación de violencia como en programas y planes específicos de prevención de violencias y promoción de la igualdad de oportunidades y trato entre varones y mujeres”.
