Más allá de los resultados deportivos seguramente en la historia quedarán como “los Juegos de la Pandemia”, un año después de lo previsto dan inicio los juegos olímpicos de Tokio este viernes 23 de julio de 2021.
Un año y cuatro meses después de su suspensión por el coronavirus, Tokio 2020 será una realidad. Se podrán en marcha los juegos con alrededor de 11.000 atletas competirán en 33 deportes en 42 sedes. El comité organizador informó que se mantendrá en estado de alerta por los casos positivos que hubo en la Villa Olímpica durante esta semana.
En la mañana argentina comenzarán los Juegos Olímpicos en el Estadio Nacional de Tokio que se reconstruyó para el evento con una capacidad para 68.000 personas. La ceremonia de apertura no tendrá público como ninguno de los 339 eventos que se desarrollarán entre el 23 de julio y el 8 de agosto.
Los campeones olímpicos Santiago Lange y Cecilia Carranza portarán la bandera argentina y por primera vez en la historia habrá un abanderado por género en el desfile inaugural de cada delegación.
Se esperan para estos juegos que las sorpresas llegue más que los resultados de los atletas por los avances de la máxima expresión de la tecnología, el 6G, los coches inteligentes y los hoteles robotizados en esta gran fiesta del deporte ha derivado en una concentración de atletas excepcionales donde de forma colectiva no hay nada que celebrar. Sin público la atmósfera olímpica ha descendido notablemente.
En la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 en 2021 se celebra hoy, viernes 23 de julio, en el Estadio Nacional de Tokio. El evento se realiza en el mismo lugar donde se hicieron los JJ.OO de 1964. En el palco de honor están el emperador Nahurito, el presidente de Francia Emmanuel Macron y la primera dama de los Estados Unidos, Jill Biden.
186 deportistas de nuestro país que competirán en esta edición que ingresaron al grito de ‘Olé, olé, olá, cada día te quiero más’, los argentinos le dieron alegría, frescura y espontaneidad al desfile, algo que fue celebrado en redes sociales ante la frialdad general de la ceremonia.
