Una noche inolvidable que quedará en la memoria de la catedral del tenis porteño, volvió Juan Martin Del potro al tenis profesional para enfrentarse con Federico Del Bonis con quien habían ganado la Copa Davis en el año 2016 en Croacia, fue debut y despedida para Delpo, quien no se encontraba de la mejor forma debido a las lesiones que viene padeciendo desde hace mucho tiempo. El resultado fue anecdótico 6-1/6-3 en el inicio del Argentina Open.
Después de casi mil días sin jugar oficialmente y ante 5000 personas la torre de Tandil hizo todo lo posible, ante un respetuoso rival que fue injustamente maltratado por algunos espectadores presentes en el estadio. La falta de actividad y las visibles muestras de dolor no le permitieron al ex número 3 del mundo dar una pelea pareja.
Del Bonis actual 44 del mundo expresó “Fue un sentimiento encontrado. Era el único partido en mi carrera que quería perder. Era muy difícil, al ser un argentino, no se espera que como es en Buenos Aires, tengas el público en contra. Tal vez dividido. Pero no en contra y agregó en forma de deseo Juan Martín volvió y esperemos que vuelva por un tiempo más largo del que dijo.
“Creo que es el único partido de mi carrera en que hasta yo quería perder”. Pocas veces se encontrará una declaración como esta de un ganador de un partido del ATP, llegó a decir…
Luego de un partido muy emotivo, que contó con la presencia de Gabriela Sabatini, el mago Coria y muchos tenistas más, inclusive algunos que son parte del torneo, los rivales de la noche hablaron al público.
Sobre el final como toda una definición acerca de lo que vendrá Del Potro se acercó a la red del BALTC y dejó su vincha en una clara señal de despedida, la organización del torno informó que la ropa que lució Delpo quedaran en las oficinas de Buenos Aires que tiene la empresa organizadora del Argentina Open, para sumarse a las zapatillas que cedió Rafael Nadal en 2015 tras ganar el título y a la vincha del español David Ferrer, quien en 2019 eligió el Argentina Open como uno de los últimos torneos de su carrera. Tanto Ferrer como Moya son dos de los máximos ganadores con tres torfeos en la historia de este torneo detrás del legendario Guillermo Vilas con ocho.
Aunque algunos creen que Delpo no sabe lo que es un retiro en la noche de ayer la sensación fue de despedida definitiva, refrendadas por sus palabras “Siento que tengo toda la vida por delante y me puedo ir en paz”, expresó entre la conmoción, el llanto, la ovación y el agradecimiento eterno, tras su derrota frente a Delbonis.
