Racing venció 2-1 este jueves a Corinthians de Brasil y logró pasar a la final de la Copa Sudamericana que se jugará en Asunción, Paraguay, contra Cruzeiro de Brasil. El equipo de Avellaneda vuelve a una final internacional después de 32 años.
En el Cilindro de Avellaneda, la academia se impuso a un duro rival dirigido por Ramón Díaz que se puso en ventaja con un gol de Yuri Alberto antes de los 10 minutos, pero luego apareció el talento de Juanfer Quintero dos veces en la primera etapa para dar vuelta la historia.
Las figuras de la noche en el cilindro fueron igualó de penal y luego puso el 2-1 con una gran definición, tras una asistencia de Maravilla Martínez, y el arquero Arias quién después de una error inicial tuvo atajadas definitorias para logara el pase a la final.
Un Cilindro vestido para las grandes citas. Estallado como en sus momentos dorados. Más de 50.000 corazones detrás de un sueño. Que empujaban, que alentaban, que vibraban. Mandaban señales desde las tribunas que se prolongaban hacia las piernas y el espíritu de los jugadores, el DT Gustavo Costas no pudo contener la emoción.
La academia viajara a Paraguay para disputar el 23 de noviembre la ansiada final, su último título internacional fue en 1988, cuando ganó la Supercopa, también ante Cruzeiro, al empatar 1 a 1 en Brasil tras haber ganado por 2-1 la ida como local.
Gustavo Costas habló en la conferencia de prensa posterior al triunfo de Racing por 2-1 sobre Corinthians en el marco de la vuelta de las semifinales de la Copa Sudamericana 2024, la primera final internacional para el club en 32 años.
El DT de la Academia habló a corazón abierto, ya no solo como entrenador sino también como hincha del club al referirse a la importancia de lo que se logró pero con la cautela de tener que dar el último -y tan esperado- paso en la definición ante Cruzeiro.
“Ahora hay que disfrutar, no ganamos nada todavía. Llegar a la final es hermoso, hay pocos equipos llegan a una final pero las finales no se juegan, se ganan. Para hacer el sueño desde el primer día en el que llegamos era eso: llegar y hacer algo con Racing en el plano internacional. Si bien algo más queríamos pelear todos, que no pudimos o nos dio.
El sueño de llevar a Racing a algo internacional está a un paso nada más”, inició el capitán del equipo que obtuvo la Supercopa 1988, el último titulo internacional y el cual se obtuvo justamente en una final ante Cruzeiro.
“Seguir juntos, nada más. Cuando estamos juntos todos, como fue hoy, lo de la gente en el recibimiento de hoy fue impresionante. Desde llegar al estadio fue conmovedor. Yo le decía a los chicos hoy en la charla, que se lo ganaron ellos. Nos tocó comer palazos, nos mataron por todos lados, como que nos teníamos ir de todos lados, pero ellos ganaron, se levantaron y tuvieron compromiso.
Siempre dije que estuve orgulloso de este grupo, porque sabían lo que nos jugábamos. Este grupo, a pesar de todos los palazos que tuvo, pudimos lograr levantarnos siempre y lograr hoy lo que Racing no hacía hace muchos años. Lo dije el primer día, que Racing necesita algo internacional”
