Son muchos los indicadores que están en alza y no precisamente los que entusiasman y traen tranquilidad a la población sino todo lo contrario, a mediados de abril comenzó una escalada muy preocupante de casos de covid en el AMBA.
También llegaron los datos sobre la inflación creciente del mes de marzo que alcanzo al 4,8% llegando a un acumulado de 42,6% en el último año.
El último cimbronazo llegó de la mano del enfrentamiento entre el Gobierno de la Ciudad y el Nacional, por las medidas anunciadas por el presidente en el marco de la pandemia de covid -19.
Hay motivos de sobra para que también aumente la preocupación en la población, es por ello que en materia de salud se intentaron tomar medidas restrictivas para detener la curva creciente de casos de coronavirus en especial en el Área Metropolitana de Buenos Aires. El gobierno dictó el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 241/2021, que entre otras medidas restringe la circulación, limita los horarios de algunas actividades y suspende las clases en la Ciudad y en la Provincia de Buenos Aires.
La economía tampoco acompaña y el dinero alcanza década día menos, vaciándose los bolsillos cada vez más rápido, mientras que el Gobierno proyectó un aumento anual del 29%, pero los analistas creen que llegará al 46%.
Atento a esta situación el gobierno nacional lanzó medidas que buscan garantizar el abastecimiento de alimentos, insumos y bienes industriales.
Finalmente este fin de semana explotó un nuevo conflicto entre Nación y Ciudad, con la Judicialización del conflicto por la presencialidad educativa, mientras el Presidente Fernández esperaba por una aceptación de la ciudad a la suspensión de clases, de a poco se fue calentado el ambiente.
Primero llegó una apelación a la Corte Suprema de Justicia por parte de GCBA, que ofuscó al Presidente, para que finalmente ayer se dirimiera el conflicto en el campo de la justicia porteña (acusada de parcial por el oficialismo nacional). Minutos antes de las 23 se anunció el dictado de clases presenciales
En el día de hoy el conflicto sigue con un paro de docente de alto acatamiento y demandas contra el Jefe de Gobierno.
Lo que no parece un buen plan se ejecuta en el AMBA, una disputa política en plena pandemia de Coronavirus.
